miércoles, 23 de febrero de 2011


El mundo de hoy se nos aparece horrible, malvado, sin esperanza. Ésta es la tranquila desazón de un hombre que morirá en ese mundo. No obstante, es justamente a eso a lo que me resisto. Y sé que moriré esperanzado. Pero es necesario crear un fundamento para la esperanza.

Jean-Paul Sartre



viernes, 11 de febrero de 2011

Hic Rhodus, hic salta


Las revoluciones burguesas (…) avanzan aceleradamente de éxito en éxito, sus efectos dramáticos se precipitan unos sobre otros, los hombres y las cosas parecen prendidos en un deslumbrante fuego, el éxtasis es el espíritu cotidiano; pero son efímeras, alcanzan pronto su clímax y entonces una profunda depresión asola a la sociedad antes de haber aprendido a apropiarse directamente de los resultados de su período de Sturm und Drang. En cambio, las revoluciones proletarias (…) se critican continuamente a sí mismas, interrumpen sin cesar su propia trayectoria, vuelven sobre lo aparentemente ya realizado para emprenderlo de nuevo, desprecian con radical crueldad las medias tintas, las debilidades, las miserias de sus primeros intentos, parecen derribar sólo a su adversario para que sorba nuevas fuerzas de la tierra y se erija de nuevo, más gigantesco, contra ellas, retroceden una y otra vez ante lo nuevo, ante la incierta enormidad de sus propios fines, hasta que surge la situación que imposibilita cualquier retorno y las propias condiciones claman: Hic Rhodus, hic salta!

Karl Marx

CAYO MUBARAK!

FUERA SULEIMAN, FUERA LA JUNTA MILITAR!

POR UN GOBIERNO DE LOS TRABAJADORES DE EGIPTO!